He de confesar que vivo en una operación bikini todo el año (todo lo que diga multiplícalo por 100… terrible, obsesionada, exigente y muy dura conmigo misma-puff creo que he roto uno de los grandes secretos que tenía con el espejo, igual ese jodío nunca será mi amigo, aunque sí el más sincero)
Pero todo tiene una explicación: vengo de un país en el que el tema del cuidado de la imagen y la perfección exterior puede llegar a ser exagerado; y aunque sean muchos los años que viva fuera, creo que conservaré un ápice de esa presión social, por así llamarlo. Aquí en España, creo que lo he superado en parte y nunca he sido tan feliz… claro siempre y cuando no engorde una talla.
Hoy, sé que mi mayor obsesión es mantenerme sana; hacer deporte, me encanta el spinning, ahora estoy aprendiendo a jugar golf (ojo no soy pija ni nada que se le parezca) me encanta caminar al aire libre… Soy mitad orgánica-mitad normal disfruto de muchas cosas pero siempre con medida y ese es “el secreto”.
Puedo decir que he probado casi todo, cuando digo esto os hablo en serio… Cremas, pastillitas milagrosas (unas brasileras que casi me matan, directo al hospital), una vez estuve con una escayola (yeso) en la cintura durante dos semanas para reducir la cintura (por cierto funcionó llegué a tener 58 cm pero quedé un poco jodida), entrenar envuelta en papel envo-plast con una crema (el resultado una quemadura de tercer grado) L-carnitina, cola de caballo, centella asiática, diente de león, diuréticos y hasta bebidas espirituosas de brujos… en fin todas las burradas que sacaban al mercado yo era la primera en la lista para probarlas; “Thanks God” mi organismo es noble y he podido revertir todas estas tonterías que he hecho.
Todo esto me enseñó, que los resultados rápidos son fugaces y lo mejor que os puedo recomendar es que no se metan nada en el cuerpo así os digan que es natural… “Hay cosas naturales que dañan y mucho” y las cremas no sirven para una mierda así que no sigan regalando el dinero…
En fin este post es una especie de regalito y voy a enumerar mis pequeños hábitos “naturales de verdad” que pueden orientar a llevar una vida mejor y a deshinchar cualquier cuerpecito para ahora que vayan a la playita puedan sentirse bien, esto es como un brain storming así que toma lo que te sirva:
- Bebe té verde.
- Si tienes tiempo al levantarte puedes hacerte un batido de pepino con piña toma eso en ayunas, es diurético. (Yo confieso que eso lo tomo una semana antes de ir a la playa adelgaza un montón)
- Puedes desayunar yogur con cereal. Yo tomo el activia 0 calorías con un puñito de Special K o Fitness y le echo uvas pasas a parte y una cucharita de pólen de abejas; llena un montón. Cuando me canso me hago un sándwich de pavo y queso con un actimel.
- Ten cuidado con los edulcorantes, el aspartame es malísimo yo uso algo que se llama Stevia lo podéis conseguir en tiendas orgánicas.
- No comas pan de noche, ni pasta, ni arroz, ni patatas…
- Come pechuga de pavo no jamón.
- A la comida aliméntate bien así no tendrás hambre en la tarde.
- No comas frituras no hay necesidad y no son nada chic. (a menos que estés en Sevilla ojo! y de Vacaciones)
- Come chocolate sólo en las mañanas y jamás todos los días.
- Si te gusta el jamón, chorizo o salchichón déjalo para las ocasiones especiales, aunque la dieta mediterránea diga lo contrario no considero esas cosas buenas para el organismo.
- Aprende a observar los colores de tus comidas y te darás cuenta lo que comes. Cuando comes guarradas, lo peor es que lo sabes.
- Come ensaladas (yo como ensaladas todos los días) Compro las de bolsita de todas las combinaciones; a parte compro nueces, almendras, queso de cabra, queso fresco de Burgos, semillas de sésamo, tostadas, cuadritos de pan, maíz y todos los días hago una distinta.
- No compres chuches, helados, patatas de bolsa… Yo compro un paquetito de galletas que no me gustan mucho y cuando tengo antojo de dulce se convierten en un manjar.
- Haz algo de ejercicio, así sea al salir del trabajo camina 20 minutos por las tiendas. En mi caso hago spinning casi todos los días… También me gusta caminar por el río Tormes.
- Elimina la cerveza de tu vida… Lo siento pero la cerveza es terrible, yo tomo una clara con limón o dos pero no más y eso una vez al mes… Nunca todos los días, si vas de pinchos pide un té o una Coca cola Light. Por cierto! El Ron tiene muchísimas calorías y engorda a morir… sólo para que lo sepas, tú sabrás lo que bebes.
- Estar de vacaciones no significa comer y beber hasta que explotes… Lo siento pero es cierto todo tiene medida y tú sabes cual es.
- Conviértete en una sushi lover tu cuerpecito lo agradecerá…
Y por último:
“Siempre que tengas la oportunidad de comer comida de casa, hazlo!”
Y sabes por qué? Un menú de 12 euros equivalen a: una camiseta básica de zara, un cinturón, pendientes, un collar, pulseras, cremas, un cine, teatro, en fin que no eres la única que trabaja, tiene un blog, va al gimnasio, lava la ropa y limpia una casa...
Recuerda:
Comer en la calle es malo para tu bolsillo, tu cuerpo y tu armario!
Para mi está de moda ir con tu tupperware- como decís aquí taper! Jajajaj!
Besos!
Dag
Os dejo con Dietético! sólo para rendir un poco de homenaje a mi Gus!
